Pues el ser humano no nos deja de sorprender y este olvidado de la vida en naturaleza y de la dieta sana, se aferra a la cómoda pero “rara” vida urbanita, y si no que le cuenten a Shannon una joven británica que no hay nada mejor que el agua de manantial.
Se llama Shannon tiene 20 años, vive en Welland, Ontario (Canadá) y su adicción a la gasolina ha conmocionado a los telespectadores, todo comenzó cuando el programa del canal TLC, My Strange Addiction, ha destapado su extraño hábito.
La Joven afirma que la ingesta de gasolina, “provoca emoción en un primer momento y luego, se quema la parte posterior de la garganta”, dice Shannon describiendo su hábito tóxico que alcanza hasta 12 cucharaditas por día.
"A pesar de que me duele, me hace sentir bien "
Asegura la joven, que para saciar su adicción o lame la tapa del bidón o la bebe directamente de la lata, la que dice es su forma favorita. Su madre asegura que al principio no podía creer la adicción cuando su hija le contó lo que le sucedía, sin embargo, se dio cuenta de la veracidad de sus palabras cuando notó el olor innegable de la sustancia en el aliento de su hija.
 El Caso de Shannon (Video: TLC) |
El programa “My Strange Addiction” (mi extraña adicción), incluye testimonios de personas que han adquirido 'hábitos' extraños o incluso peligrosos para la salud.
Los casos más sonados de este polémico documental televisivo, son por ejemplo, el de una mujer que llevaba una cabeza de muñeca a cuestas a todos lados y otro que necesitaba olfatear Pine-Sol (un líquido de limpieza) cada 15 minutos.
La adicción de Shannon a beber gasolina, se conoce días después de otro caso, en el que un hombre de Carolina del Norte muriera después de beber “accidentalmente” un bidón enterito que contenía el mismo líquido.
